Índice
Introducción
La operación de cadera para implantar una prótesis es una sustitución, que los especialistas de nuestro seguro médico de confianza optan por realizar cuando los elementos que conforman la articulación no tienen la capacidad de realizar sus funciones naturales. Esto puede suceder por diferentes motivos, ocasionando enfermedades y su tratamiento termina siendo esta intervención.
Durante la misma, se reemplazan nuestros elementos naturales por otros fabricados en material sintético. El momento indicado para su implantación es cuando el paciente no responde correctamente a los tratamientos conservadores habituales, que son la rehabilitación, los antiinflamatorios y el reposo.
¿Qué es la cadera y cuál es su funcionamiento?
Esta articulación es la que hace de anclaje de la pelvis con la cabeza del fémur, que es el hueso más largo de nuestro cuerpo. La pelvis es una cavidad del hueso de la cadera que tiene forma de semiesfera y se denomina acetábulo. Aquí es donde se encaja la cabeza femoral o el extremo superior del fémur.
La cabeza femoral se mueve en el interior del acetábulo para permitirnos correr o andar. Ambos están recubiertos por una capa cartilaginosa que se encarga de facilitar el deslizamiento de ambas partes sin dolor. La cadera, finalmente, está rodeada de tejidos fibrosos y ligamentos que conforman la articulación y que nos permiten realizar movimientos como abducción, rotación interna o externa, aducción, flexión y extensión.
Tipos de prótesis de cadera
Estas prótesis las podemos clasificar en base a tres aspectos:
1. Clasificación según la intervención que se realice.
2. Según el tamaño y anclaje al hueso de sus componentes.
3. Cantidad de hueso reemplazado.
Tipo de cirugía
Dentro del tipo de intervención que se vaya a realizar para la implantación de la prótesis, podemos diferenciar dos tipos:
- Primaria, que es la que cambia un componente o la articulación por una prótesis.
- De revisión, que es aquella en la que se procede a reemplazar una prótesis vieja o desgastada por otra nueva.
Tamaño de los componentes
Los componentes los podemos clasificar en tres tipos diferentes:
- Reemplazo de prótesis convencional, donde el tamaño de los elementos es el habitual.
- Reemplazo de prótesis de cadera de superficie, donde el vástago (que es el anclaje en el fémur) es muy pequeño. Es normal en personas jóvenes que mantienen con integridad el fémur.
- Reemplazo de prótesis de vástago corto, que tiene todos los componentes habituales excepto el vástago, que es más corto de lo normal. El objetivo de reducir la longitud de este componente es minimizar el daño por presión para que el fémur pueda conservarse mejor.
Anclaje de los componentes
En función de cómo sea la unión de los distintos elementos entre sí y con las otras estructuras óseas que sirvan de soporte, podemos diferenciar tres tipos de prótesis:
- De cadera cementada, en la que se utiliza cemento para adherir a las partes óseas los componentes.
- De cadera no cementada, en la que sus componentes no se unen con cemento. En su lugar, se utilizan prótesis híbridas en las que el vástago y la cabeza femoral se unen al interior del hueso con cemento, pero el acetábulo de la pelvis no.
- De cadera híbrida inversa, que resulta ser el mismo caso que la cadera no cementada pero al revés, es decir, el acetábulo es lo que se une con cemento.
Cantidad de prótesis reemplazada
Esta última clasificación es la que realizamos en función de la prótesis que se implante. Podemos diferenciar dos tipos:
- Prótesis parcial de cadera, en la que se recambia el componente de la cabeza femoral con el vástago.
- Prótesis total de cadera, una esta cirugía en la que se reemplaza la cadera en su totalidad, incluidos los componentes de la articulación.
¿Cómo se implanta una prótesis de cadera?
Antes de que un paciente se someta a una intervención de estas características, debemos saber que es necesario llevar a cabo un estudio preparatorio que va a consistir, como mínimo, en una analítica sanguínea, un electrocardiograma y una radiografía de tórax. Durante el proceso preoperatorio, será el anestesista el profesional encargado de solicitarnos otro tipo de pruebas específicas si lo considera necesario, tal y como pueden ser pruebas de alergia o de ventilación pulmonar.
Para realizar esta operación puede emplearse raquianestesia, que es una anestesia de espalda para abajo, o anestesia general. Habitualmente, lo que se utilizará es la general, porque la intervención durará varias horas. Cuando la anestesia se administre y se haya preparado el campo quirúrgico, se nos realizará una incisión en la zona a operar. Esta incisión puede variar en función del equipo o del cirujano que lleve a cabo la intervención.
La articulación de la cadera quedará expuesta y se resecará la cantidad de hueso necesario para que se implante la prótesis. Normalmente se suele cortar la cabeza y el cuello del fémur y se agujerea la zona más superficial del acetábulo pélvico. Además, en el fémur nos realizarán un orificio profundo para tener espacio y que se pueda colocar sin problema el vástago de la prótesis.
Los cirujanos deben realizar una reducción de prueba. Esto es que situarán en posición una prótesis temporal que permita conocer el tamaño de los componentes que se adapten mejor a nuestra anatomía, pues cada paciente presenta particularidades.
Cuando se haya tomado la decisión acerca de qué prótesis implantar, nos fijan los componentes definitivos según los citados con anterioridad. Una vez finalizado el proceso, se cierran todos los planos de la herida quirúrgica mediante grapas o suturas.
En muchas ocasiones, pensamos que lo mejor es lo más nuevo, pero esto no siempre es así. Algunos modelos están más que contrastados y probados en diferentes pacientes, incluso en menores de 55 años, con supervivencias que superan el 90 % a 20 o 25 años.
Conclusión
El cirujano especializado será el que debe conocer con profundidad las prótesis y elegir en base a unos criterios científicos y apoyándose en su experiencia personal, lo que puede ser más beneficioso para cada paciente. No obstante, es importante personalizar cada situación y ofrecer a los pacientes toda la información que necesitan antes de tomar la decisión final sobre qué prótesis de cadera implantarse.